La francesa Sanofi Pasteur ha marcado un camino relevante pata las empresas farmacéuticas al descartar seguir usando células de bebés abortados en su medicamento Poliovax, contra la polio.
La farmacéutica más grande de vacunas del mundo usaba la linea de células fetales MRC-5, que procedían de un bebé que fue abortado en 1966.
Esa decisión habría afectado también a otras partes del catálodo de vacunas de Sanofi Pasteur, que ha dejado de usar el MRC-5 también con Pentacel y Quadracel, también vacunas usadas contra la polio.
Como alternativa, la farmacéutica usará células Vero, que provienen de los monos. También continuará produciendo la vacuna antipoliomielítica IPOL, que ya utilizaba células Vero.
No solamente la línea MRC-5 de células fetales ha sido usada, existen otras como es el caso de la WI-38, usada para cultivar los virus usados en las vacunas contra el sarampión, las paperas, la rubeola, la polio, la rabia y la varicela.
Sanofi Pasteur y el uso de células fetales por la industria
El uso de células provenientes de bebés abortados por la industria no es algo nuevo.
Ya en 2011 saltó la noticia de que la multinacional Pepsico utilizaba restos de fetos humanos que fueron eliminados mediante abortos para las investigaciones que llevan a cabo con la finalidad de mejorar sus productos.
En agosto de 2010, la multinacional de refrescos había firmado un acuerdo de cuatro años con la compañía Senomyx para desarrollar endulzantes potenciados para sus bebidas. Por este trabajo PepsiCo pagó 30 millones de dólares por la investigación y futuras regalías de sus productos que en el futuro sean manufacturados con esta tecnología.
Un año después de la polémica, la empresa de bebidas abandonó aquel programa.
1 Comentario. Dejar nuevo
Ya es hora que ese laboratorio deje de ensuciar la memoria de Louis Pasteur, eminente científico y devoto católico.