Regalo musical de un servidor

Hace unos pocos años, en paralelo a mi ya experimentada situación de ITP o Invalidez Total y Permanente, empecé a escuchar la Salve monacal de la Iglesia desde mi teléfono móvil. Tiene una duración pneumática (de pneuma), o por así decirlo de pentagrama, de dos minutos y treinta segundos (puede llegar a cuarenta segundos). Empecé a escuchar al signore Giovanni Vianini y su Schola Cantorum Gregoriana Mediolanensis que dirige en Milano (Italia).

Hacía lustros que quería aprendérmela. Me costó meses soltar mi voz en privado. Más adelante la solté en público reducido. Siempre pienso que no me la sé bien. Hoy es día 1 de octubre y empieza el mes 2020 dedicado al rezo del Santo Rosario. Un poco antes de comer me he grabado. Es difícil esto de autograbarse. Tienes que sujetar bien el móvil con una mano procurando que no se mueva. Al mismo tiempo cantar bien de memoria. El YouTube sale al momento. Lo he visualizado y le doy mi aprobado.

Pienso que puede ayudarles a todos Vds. a crear ambiente familiar o personal en el rezo del Santo Rosario. Octubre es el mes que la Iglesia dedica a este rezo. Creo que hay hombres y mujeres de distintas edades que saben cantar y cantan bien. Igual Vd. que me lee es una de estas personas. Si yo puedo cantar la Salve monacal Vd. también puede. Si Vd. comete fallos de canto, yo también los cometo. Y si yo puedo cantar así, Vd. también puede. E incluso cantar mejor. Todo es cuestión de proponerse esto.

Mi YouTube de hace un rato es https://youtu.be/ow-CLRBT9P8 No es mi mejor grabación pero es la de hoy día 1 de octubre. Creo que hago bien el falsete de soprano. Mi tono de voz no es éste. En mi época dorada de canto coral cantaba con tesitura de bajo y no de tenor. El problema surge en los templos cuando algunas mujeres se emplean a fondo con sus tesituras femeninas de voz de bajo. Te ves obligado, por lo menos yo, a intentar un falsete de soprano para doblar sus voces por arriba.