El domingo 11 de noviembre tuvo lugar el Día de la Iglesia Diocesana que invita a tomar conciencia de la realidad de nuestra iglesia más cercana. Una Jornada como ésta, una vez al año, nos hace ver las grandes cifras y las pequeñas: las 70 diócesis españolas con sus 23.000 parroquias, los más de 18.000 sacerdotes, la ingente actividad de órdenes y congregaciones religiosas, la de los catequistas y voluntarios en tantas labores asistenciales que han sostenido a muchas familias durante la crisis. Y es conveniente recordar que, en esta gran familia que es la Iglesia, cada uno de sus miembros es corresponsable de su labor y sostenimiento.
Necesita nuestra oración constante, nuestro tiempo, nuestra aportación económica; necesita, en definitiva, que la ayudemos para que pueda seguir ayudando a los demás.