A mediados de septiembre, el gobierno de Polonia emitió un comunicado confirmando que «el trabajo de los ministros de salud y justicia en un proyecto de ley sobre la castración química obligatoria para pedófilos estaba casi terminado».
Según informes de los medios polacos, el ministerio planea hacer obligatorio el tratamiento para los reincidentes. Las píldoras reducirían o eliminarían el deseo sexual al suprimir la producción de testosterona.
«Nuestra idea aún no tiene forma de ley», dijo el portavoz del ministerio, Jakub Golab, al diario Polska. «Actualmente estamos consultando con sexólogos. Queremos que entre en vigor lo antes posible».
En tan solo un año, a los pedófilos condenados también se les colocarán collares electrónicos si tienen una orden judicial en contra de acercarse a sus víctimas, informó Polska. Si los collares resultan efectivos, el Ministerio de Justicia decidirá si deben entregarse a todos los pedófilos.
El primer ministro Donald Tusk planteó el controvertido tema después de que un hombre de 45 años fuera acusado de haber violado y mantenido cautiva a su hija de 21 años durante seis años.
El sospechoso, apodado el polaco Josef Fritzl en una referencia al hombre austríaco acusado de encarcelar a su hija y tener siete hijos con ella, enfrenta hasta 15 años encarcelado si es declarado culpable.
La mujer en Polonia dio a luz a dos hijos, en 2005 y 2007, supuestamente de su padre. Ella sostiene que él la presionó para que los diera en adopción.
El caso desencadenó un debate nacional sobre cómo se debería castigar a los delincuentes sexuales.
«Quiero reunir todas las leyes vigentes en Europa para introducir en Polonia la ley más rigurosa posible con respecto a los delincuentes que violan a niños», dijo Tusk.
Indignación de la UE sobre Polonia
La castración química para delincuentes sexuales reincidentes ya se ofrece en varios estados de Estados Unidos, así como en países europeos, incluidos Suecia, Alemania y Dinamarca. Sin embargo, es un proceso voluntario.
Activistas de derechos humanos y expertos legales han criticado los planes polacos, diciendo que obligar a un paciente a someterse a una castración química es inadmisible según el derecho polaco e internacional.
La realidad es que Bruselas no tiene poder para intervenir. No tiene la competencia, porque el derecho penal se decide a nivel nacional.
Sin embargo, este miércoles 16 de septiembre, el Parlamento Europeo ha rechazado el proyecto polaco. Esta situación nace cuando en noviembre del año pasado el propio Parlamento Europeo aprobó una resolución condenando esa iniciativa, a la que acusaban de “criminalización de la educación sexual en Polonia”.
La iniciativa polaca contra la pedofilia fue también criticada en el informe elaborado por el eurodiputado socialista español Juan Fernando López Aguilar. Ese es el informe que ha aprobado el Parlamento, incluyendo en su punto 54 una crítica a ese proyecto contra la pedofilia, afirmando que “con él se intenta de hecho criminalizar la educación sexual dirigida a los menores”.
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En la UE se indignan y escandalizan porque muchos políticos están vinculados con la pederastia, como ha ocurrido en los EE.UU. con el escándalo de los políticos y personajes de fama, que iban a la isla privada de Jeffrey Epstein (Little Saint James) a cometer terribles crímenes con niños, incluso torturados. Curiosamente la prensa manipulada ha pasado por alto sobre estos terribles crímenes, porque los lobbis se lo han impedido. No es de extrañar que a Polonia la hayan censurado por pedir castración a la violación, pretendiendo así evitar nuevas violaciones y recursos penitenciarios.