En el estado más poblado de la India, Uttar Pradesh, se ha implementado una nueva y más estricta ley contra las conversiones religiosas, según un reciente informe de AsiaNews.
La reciente ley contra las «conversiones forzadas», que ha suscitado preocupaciones significativas sobre la libertad religiosa, es un ejemplo clave de cómo las legislaciones pueden ser utilizadas para restringir y controlar la expresión religiosa de las minorías.
Ley anti conversión de Uttar Pradesh
El proyecto de Ley de Prohibición de la Conversión Ilícita de Religiones de Uttar Pradesh de 2024 es una enmienda a las leyes existentes del estado.
Esta nueva ley no solo endurece las penas por presuntas conversiones forzadas, llegando incluso a incluir la cadena perpetua, sino que también amplía el proceso de denuncia.
Ahora, cualquier persona puede acusar a otra de conversión forzada sin la presencia o conocimiento de la presunta víctima.
Esta disposición abre la puerta a denuncias infundadas y facilita el abuso del sistema legal para perseguir a minorías religiosas, en este caso, los cristianos.
Preocupaciones y denuncias
La comunidad cristiana de Uttar Pradesh y otras partes de la India ha expresado su preocupación por las implicaciones de esta ley.
La medida amenaza la libertad religiosa debido a los numerosos incidentes de intolerancia e intimidación por parte de sectores extremistas del movimiento Hindutva.
El Consejo Nacional de Iglesias de la India (NCCI) ha manifestado su oposición a la ley, argumentando que viola la Constitución de la India.
Según el NCCI, la conversión religiosa no debería ser criminalizada a menos que se produzca mediante coerción, influencia indebida o tergiversación, situaciones que solo la víctima puede alegar.
El NCCI también ha señalado que la enmienda deja una «zona gris» que podría ser utilizada por los funcionarios estatales para atacar a individuos o comunidades en función de sus prácticas religiosas.
Esta ambigüedad incrementa el riesgo de acoso y criminalización de prácticas religiosas pacíficas, como el bautismo en el cristianismo.
En esencia, estas leyes pueden ser utilizadas para justificar la persecución y hostigamiento de los cristianos, limitando su derecho a practicar su fe libremente.
