Mi carpeta de correo electrónico no deseado en Outlook de Office 365 (actualmente de Microsoft 365), como su nombre indica, es ¿solo no deseado? Va a parar a ella, en vez de a mi bandeja de entrada, todo aquel correo electrónico no deseado ¿por quién? Por ejemplo, hace unos minutos (martes 12 por la mañana) en mi carpeta de no deseado, una ágil respuesta de CERES de la FNMT (Fábrica Nacional de Moneda y Timbre www.cert.fnmt.es ), ante una pregunta mía muy reciente. ¡Pregunta cerrada vía mi certificado digital no caducado instalado en mi pc!
El sistema ha considerado que esta respuesta, de organismo oficial a una pregunta mía acerca de la renovación telemática de mi certificado digital operativo, es un correo electrónico que yo no deseo recibir. ¡Y así en cantidad de correos con personas o entes con los que mantengo contacto! Incluso en algunos de estos correos señala que se trata de correo SPAM. ¡Incluso spam singular de personas muy conocidas! Es preciso visualizar uno a uno todos los correos electrónicos depositados en esta carpeta. ¡Y restaurar al instante, mediante arrastre a la bandeja de entrada, los que son deseados según mi criterio ponderado y no según el selectivo del sistema!
Es preciso perderle el miedo a este macabro e impresentable sistema que hace lo que le da la gana. Prefiero pensar esto, aun cuando me cuesta creer que sea así, a pensar que se trata de algo personal. Pienso que tengo competencia de usuario y que sé ver los defectos ajenos de la competencia telemática. ¡No hay que faltar a la caridad con el prójimo! ¡Aunque se trate de un prójimo informático no deseado! En cambio, hay que apreciar y mucho al prójimo informático deseado. En mi caso el deseado de pago McAfee All Acess Housebold.
Otro ejemplo de hace un minuto (jueves 14 cinco de la tarde). Un correo importante, en respuesta a uno mío, que el sistema basura lo ha depositado en la carpeta no deseado. Un correo del Centro de Salud Quirón. Del Centro de Salud sito en el Hospital General de Cataluña, a una parada de FGC desde Rubí. Un correo ofreciendo trato de atención de visita concertada hospitalaria por teléfono y chat. Un correo detallando distintos casos de distintas dolencias en las que hay acudir a ser visitado por el doctor especialista, aunque haya pandemia operativa, ofreciendo de entrada una alternativa inicial de visita médica telefónica.
Este centro de salud es mi centro de urgencias y de trato con especialistas, con cargo a mi valioso seguro de asistencia sanitaria. Este seguro me cuesta dinero cada mes. Pues este correo remitido por Quirón a su cliente usuario es correo basura según el sistema. ¿O tal vez es un correo de un administrador “pirata” del sistema no detectado por McAfee? ¡No me lo puedo creer! Tengo experiencia en visitas programadas, atenciones en urgencias con subsiguientes ingresos hospitalarios y operaciones quirúrgicas programadas en este centro hospitalario.
Yo tengo un prójimo deseado de pago denominado McAfee All Acces. Pago muy a gusto la renovación de la suscripción vía tarjeta de crédito VISA. Me protege en mi hogar en los equipos existentes y en la telefonía móvil. Cuando alguna vez me ha alertado de una conexión peligrosa y no le he hecho caso, pues me he equivocado. He aprendido a ser niño bueno. Este correo recibido de CERES es muy deseado. ¡Lo estaba esperando!
Para renovar ahora el certificado digital en oficina física fiscal, el sistema AEAT padece pandemia confinada todo cerrado. CERES cumple vía electrónica. Yo cumplo preguntando dudas con anticipación. El correo electrónico que figura en la AEAT no lo tengo en la actualidad. Podré cambiarlo al solicitar la renovación telemática de mi certificado digital a CERES. ¡No antes de 60 días anteriores a su caducidad!
No tengo en estos momentos prisa telemática de notificación fiscal de rendimientos ejercicio 2019. La efectué el tercer día hábil repasando y confirmando borrador. Tampoco la tengo de percepción inmediata de devolución renta 2019. Hacienda simple cumple y me debe. ¡Yo cumplo más y primero pues me anticipo! He aprendido a esperar para cobrar lo que Hacienda me debe. ¡Aunque pasen meses, termine el período hábil, me vengan con monsergas navideñas, y acabe percibiendo a principios de 2020 una cantidad inferior a la reflejada en borrador confirmado, correspondiente a la declaración del ejercicio 2018!
Mantener operativos al día la saga de programas ofimáticos de Microsoft Office 365 (Word, Excel, Acces, Power Point, Outlook y algún otro) tiene un coste a mi cargo de 10 euros mensuales mediante cargo bancario. ¡Yo no voy de gratis! ¡Pago como es debido por unos servicios ofimáticos de calidad! Mantener operativo mi seguro de asistencia sanitaria (dos personas) con la entidad ADESLAS vale un pastón mensual y es muy recomendable.
¡Pandemia en la calle, pandemia en los templos y pandemia en Hacienda! ¿Pandemia telemática ofimática? ¿Pandemia repetitiva mía? Me quedé corto hace un año y algo.¿Quién se ha creído quién es el sistema, o su valedor pirata cutre, para interferirme sistemáticamente en cosas importantes de mi vida?