Las restricciones de la movilidad, que se están implantando en las distintas comunidades autónomas debido al repunte de la pandemia, está provocando una nueva oleada de ERTE en empresas de considerable tamaño como El Corte Inglés, Mango, Primark, H&M, Amrest, Burger King o Alsea. Una de las primeras en actuar ha sido El Corte Inglés, que podría suspender el empleo de hasta 9.000 trabajadores. El grupo aplicará ERTE a parte de los trabajadores de sus tiendas en Cataluña, Asturias y Castilla y León, comunidades donde las medidas de restricción a la movilidad implican en buena parte el cierre de sus establecimientos.
Los ERTE serán por fuerza mayor y en principio durarán 14 días, a la espera de saberse si las citadas restricciones se prolongan, en cuyo caso, se haría lo propio con los expedientes. Fuentes sindicales calculan en este sentido que, por el momento, se verán afectadas cerca de 9.000 personas (5.000 en Cataluña, 2.000 en Asturias y otras 2.000 en Castilla y León).
Y no son los únicos porque, según explican fuentes del sector, el resto de las grandes cadenas, como Primark, Ikea, Media Markt, Decathlon o Fnac afrontan una situación similar y suspenderán también el empleo de miles de trabajadores. Todo indica, sin embargo, que la gran excepción volverá a ser Inditex, que rechazó ya durante el primer confinamiento la posibilidad de llevar a cabo un ERTE y mantuvo las nóminas al cien por cien de su plantilla pese al cierre de los establecimientos. Ante todo ello, desde Anged, la Asociación Nacional de Grandes Empresas de Distribución, aseguran que «las medidas tan severas que se están tomando no tienen ningún sentido, teniendo en cuenta que se han adoptado todas las medidas de seguridad en los establecimientos, además de los controles de aforo, lo que garantiza que las compras son seguras».
Con una caída del consumo del 7,7% hasta agosto y descenso en todas las comunidades autónomas, desde Anged recuerdan que según la OCDE, durante el confinamiento y la vigencia del Estado de Alarma el comercio ha restado 9,5 puntos al PIB. «Ninguna otra de las grandes economías de la OCDE ha sufrido un retroceso tan acusado de este sector. La contribución negativa del comercio al PIB durante este periodo multiplica por seis al de la industria», advierte la patronal.
El Estado ha destinado hasta el mes de septiembre un total de 17.654 millones de euros para costear el mecanismo de los ERTE de la covid. Esta herramienta está siendo una fuente a la que están recurriendo las empresas de la hostelería, el comercio o los hoteles, entre otros, para poner a hibernar a sus plantillas ante los rebrotes y las nuevas restricciones y minimizar la destrucción de empleo. En octubre casi 600.000 trabajadores seguían acogidos a uno de estos expedientes y la cifra comienza a repuntar ante la segunda ola de contagios. En el momento más álgido de la primera ola, 3,4 millones de trabajadores llegaron a estar cubiertos por un ERTE.
En este sentido, las previsiones económicas de otoño, publicadas por la Comisión Europea, confirman que la economía española sufrirá el mazazo del virus como ningún otro socio europeo. La Comisión empeora las cifras españolas respecto a sus proyecciones del verano y las del Gobierno, hasta prever una recesión del 12,4% para este año. Además, acorta el rebote previsto para el año que viene hasta el 5,4%. En 2022, el crecimiento será del 4,8%. El hundimiento de la economía española destacará del resto de sus vecinos europeos, muy por delante del pinchazo de Italia (-9,9%). Para el conjunto de la UE, la Comisión espera una caída del 7,4% este año, con un despegue del 4,1% el que viene. La eurozona perderá un 7,8% en 2021 y mejorará un 4,2% en 2022.
Una de las primeras en actuar ha sido El Corte Inglés, que podría suspender el empleo de hasta 9.000 trabajadores. El grupo aplicará ERTE a parte de los trabajadores de sus tiendas en Cataluña, Asturias y Castilla y León. Share on X