Los dramáticos sucesos que han tenido lugar en Barcelona y el conjunto de Cataluña a lo largo de la semana, ya empiezan a tener efecto sobre los resultados electorales del 10-N, en la previsión a día de hoy. Seguramente irán a más, porque el trabajo de campo no recoge bien el efecto de todos los días y, también, porque está la bola de nieve mediática en torno a las barricadas encendidas y las carreteras cortadas.
En anteriores estimaciones electorales basadas en un promedio de las cinco últimas encuestas hasta el 16 de octubre, el resultado daba que el PSOE perdía posiciones al alcanzar 120 escaños, esta tendencia ahora se afianza y parece claro que se situaría por debajo de la cifra de los que actualmente tiene, 123.
Algo parecido pero a la inversa sucede con el PP. La media lo situaba en 99 escaños y ahora parece alcanzarlos, e incluso con posibilidades de superar el centenar.
UP desciende ligeramente los 34 que alcanzó. Marcaría por tanto una tendencia al descenso pero con cuentagotas. Más País se mantiene en la tónica de los 6 a 7 escaños.
Donde se registra el mayor impacto de los disturbios en Cataluña es Vox. Podríamos decir que el independentismo más radicalizado es el gran ordeñador de votos para Vox porque es el que registra ya no una tendencia al alza, sino un salto. En nuestra evaluación media obtenía 25 diputados, y ahora si bien no únicamente, sí con facilidad, se situaría en la treintena o más.
Cs es el partido que guarda una simetría negativa con Vox. Si estos explosionan, Cs implosiona y continúa su caída que parece inexorable. De los 27 escaños que obtenía en nuestra previsión (recordemos que ahora tiene 57), ahora descendería en un abanico que va de los 23 a los 19. La catástrofe para Rivera, de confirmarse estos resultados, será total y es difícil que pueda sobrevivir políticamente.
En el caso de Cataluña, los resultados mantienen un perfil constante y no queda claro si habrá un ligero descenso de las posiciones actuales o un aumento, porque las encuestas discrepan. En todo caso, está claro que ganaría ERC en un abanico que va de los 14 a los 16 escaños (ahora tiene 15), mientras que JxCat presenta una oscilación grande, dado que si bien hay encuestas que sólo hay otorgan 4 , en otras, como la de IPSOS, se mantiene en los 7. Es visible que cuando la encuesta le da un mejor resultado en ERC, JxCat empeora y a la inversa. El conjunto independentista a día de hoy no superaría la cifra de 22 escaños que logró en las pasadas elecciones, y se situaría entre los 21 y 22. Si las encuestas se confirmaran, la gran movilización por la liberación de los presos y de protesta contra la policía les habría restado representación parlamentaria. No habría sido un buen negocio.
El enigma es la CUP. La mayoría de encuestas no le otorgan escaño, pero las muestras son demasiado pequeñas como para hilar tan fino, sobre todo cuando es un partido que se presenta por primera vez en las elecciones españolas. En la anterior secuencia de 5 sondeos estudiados, sólo la de GAD3 le daba un escaño. Ahora con 4 encuestas, también sólo una le da representación, pero muy grande, 3 escaños. Si este resultado se produjera, el complejo independentista superaría la representación actual. Creemos que esta estimación de 3 escaños es excesiva y que lo más probable es que el resultado se mueva entre 0 y 1.