fbpx

Graves incoherencias en el proyecto de Ley de eutanasia del Parlamento escocés

Libertades

COMPARTIR EN REDES

La eutanasia en Escocia ha cobrado fuerza con la introducción del proyecto de ley de muerte asistida para adultos con enfermedades terminales que actualmente se está debatiendo en el Parlamento escocés.

Este proyecto de ley busca establecer un marco legal para permitir que los adultos con enfermedades terminales puedan optar por un suicidio asistido.

Problemas legislativos

La nefasta propuesta ha generado una movilización pública en diversos sectores, incluyendo el Colegio de Abogados de Escocia, que ha manifestado serias reservas sobre la competencia del proyecto de ley y su alineación con la legislación vigente.

Elaine Coull, coordinadora del Comité de Derecho Médico y de Salud de la Sociedad de Derecho de Escocia, publicó una crítica contundente el 22 de agosto, destacando una serie de deficiencias que, según ella, deben abordarse con urgencia.

Coull señaló que el proyecto de ley, tal como está redactado actualmente, podría entrar en conflicto con el Convenio Europeo de Derechos Humanos y con la legislación escocesa sobre salud mental y capacidad. En particular, mencionó que la propuesta parece estar en contradicción con elementos clave de la Ley de Edad de Capacidad Legal de 1991, una pieza fundamental de la legislación escocesa que establece los parámetros sobre la capacidad legal de los ciudadanos para tomar decisiones.

El papel de los profesionales médicos

Una de las principales preocupaciones expresadas por Coull se centra en el papel asignado a los profesionales médicos dentro del marco propuesto por el proyecto de ley. «El papel propuesto para los profesionales médicos es igualmente preocupante», afirmó Coull. Pues las disposiciones del proyecto de ley no son adecuadas para abordar cuestiones clave, como quién puede proporcionar una evaluación médica válida y qué sucede si un médico considera que no se han cumplido los requisitos necesarios para el suicidio asistido.

Este vacío legal podría llevar a interpretaciones variadas y a la posible mala praxis, algo que la Sociedad de Derecho de Escocia considera inaceptable dada la gravedad del asunto.

El rol de los abogados

Otro punto crítico planteado por el Colegio de Abogados es el rol de los abogados tal como se describe en el proyecto de ley. Coull subrayó que existe una preocupación legítima de que los abogados, que según el proyecto de ley deberían actuar como apoderados para firmar documentos en nombre de personas que no pueden hacerlo por sí mismas, puedan no ser las personas más adecuadas para emitir juicios sobre la capacidad mental o la comprensión de un individuo sobre el efecto de un documento legal. Esta tarea, según Coull, se alinea más con una función notarial, pero el proyecto de ley exige que el abogado también valore la capacidad del individuo para entender las implicaciones de la muerte asistida, lo cual puede exceder el ámbito de su competencia profesional.

Escasas revisiones

Además, el Colegio de Abogados de Escocia cuestiona el tiempo propuesto antes de que se revise la ley. Según el proyecto de ley, se requiere una revisión después de cinco años de su implementación. Coull considera que este período es demasiado largo, especialmente dada la gravedad y el impacto potencial de la legislación sobre la sociedad escocesa.

Para el Colegio de Abogados, es esencial que cualquier legislación sobre un tema tan delicado como la muerte asistida sea revisada y actualizada rápidamente en respuesta a los problemas que puedan surgir una vez que se ponga en práctica.

Para la Sociedad de Derecho de Escocia, el enfoque debería centrarse en proporcionar el máximo cuidado a las personas con enfermedades terminales, en lugar de facilitar su muerte.

El  Colegio de Abogados de Escocia no se opone al proyecto de ley de muerte asistida por razones morales o éticas. En cambio, su análisis se ha centrado en los aspectos legales y prácticos del proyecto de ley, destacando la necesidad de  evitar el uso indebido del suicidio asistido por una mala praxis legal. La crítica de Elaine Coull subraya la importancia de una redacción meticulosa y de la consideración cuidadosa de todos los elementos legales y éticos involucrados en la cuestión del suicidio asistido, enfatizando que cualquier defecto en la legislación podría tener consecuencias graves e imprevistas para la sociedad escocesa.

Por tanto, la postura del Colegio de Abogados de Escocia, remarca y deja muy claro que el problema de la eutanasia  puede ser una gran trampa legal, además del evidente y objetivo atentado moral. 

¿Te ha gustado el artículo?

Ayúdanos con 1€ para seguir haciendo noticias como esta

Donar 1€
NOTICIAS RELACIONADAS

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.

Rellena este campo
Rellena este campo
Por favor, introduce una dirección de correo electrónico válida.

El periodo de verificación de reCAPTCHA ha caducado. Por favor, recarga la página.