Europa se muere. Europa se autodestruye. Europa se autoinmola. Europa se suicida… no importa como queramos expresarlo, pues lo cierto y grave es que la civilización occidental tiene las horas contadas, y la Unión Europea también, si no se toman medidas urgentes y extremas.
La Xenofobia no es el mayor problema de Europa. Ni el crecimiento de la «extrema derecha»… no; el mayor peligro al que se enfrenta a Europa se llama terrorismo islámico, islamismo radical, terrorista o como quieran ustedes llamarlo. Cualquier cosa menos hechos aislados provocados por perturbados.
Y no será una guerra ni una conquista bélica la que acabe con Europa ni con nuestra civilización. Ha sido la propia sociedad europea la que, optando por la comodidad, ha optado por inmolarse, gracias al aburguesamiento y el «bienestar», ha renunciado a la más elemental regla de una sociedad para su supervivencia: el reemplazo generacional.
Solo una apuesta decidida por la maternidad y la vuelta a considerar a la familia como el centro de la sociedad, pueden salvar a Europa.
Al igual que el proceso de descristianización y secularización de Europa es, principalmente, responsabilidad de los cristianos por haber renunciado a la defensa de su fe, creencias y valores en la esfera pública, la islamización de Europa será responsabilidad de sus sociedades, como ya están comprobando en Suecia, Bélgica o Francia.
Ni que decir tiene que los grandes «estadistas» que nos gobiernan en España y Europa como títeres del Nuevo Orden Mundial (que emplea la ONU como instrumento de implantación de sus planes de reemplazo social en occidente) tienen también su parte de responsabilidad. Pero una sociedad tiene, al fin y al cabo, los políticos que merece su grado de interés e involucración con la «cuestión pública» de su país.
Por si alguno de los que llegan tarde a esta reflexión sobre la inmolación de Europa tuviera alguna duda, simplemente les recordamos que importantes líderes políticos y religiosos del Islam ya lo vaticinaron hace décadas. Como muestra, dejamos simplemente 3 ejemplos:
El expresidente de Argelia, Huari Bumedian dijo en un famoso discurso pronunciado en 1.974 ante la Asamblea de la ONU:
«Un día, millones de hombres abandonarán el hemisferio sur para irrumpir en el hemisferio norte. Y no lo harán precisamente como amigos. Porque irrumpirán para conquistarlo. Y lo conquistarán poblándolo con sus hijos. Será el vientre de nuestras mujeres el que nos dé la victoria. Al igual que los bárbaros acabaron con el Imperio Romano desde dentro, así los hijos del Islam, utilizando el vientre de sus mujeres, colonizarán y someterán a toda Europa.»
También el imán Al Qadarawi, en 2.005, hará la siguiente declaración:
«El Islam volverá a Europa como conquistador victorioso tras ser expulsado de ella dos veces, una desde el sur, desde Al Ándalus, y la segunda desde el este, cuando llamó a las puertas de Atenas. Conquistando Europa, el mundo será del Islam». (el imam Al Qadarawi, parece que confunde Atenas con Viena).
Y el líder libio Muammar el Gadafi dirá posteriormente:
«Hay signos de que Alá garantizará la victoria islámica sobre Europa sin espadas, sin pistolas, sin conquistas. No necesitamos terroristas, no necesitamos suicidas, los más de 50 millones de musulmanes en Europa la convertirán en un continente musulmán en pocas décadas».
El que tenga oídos para oír, que oiga.
Daniel Fernández Venegas