La tendencia de legitimar la ideología de género incorporándola en los entornos de educación llega a límites kafkianos. Escocia acaba de anunciar públicamente que será el primer país del mundo que incorporará oficialmente en sus planes de estudios de las escuelas la formación en la ideología LGTBI. Se trata de una victoria contundente del homosexualismo político.
Si en España se ha anunciado también recientemente el lanzamiento del primer Máster oficial en Estudios LGTBI, ahora un país anuncia que se adhiere educacionalmente a una ideología concreta, Escocia.
Tal y como informa Magnet, la iniciativa ha tenido lugar apenas treinta años después de la última pieza legislativa que censuraba la «promoción» de la homosexualidad en la esfera pública.
Esta iniciativa es consecuencia de la intensa campaña activista del homosexualismo político, liderada por parte de Time for Inclusive Education (TIE) y que aún no tiene fecha de entrada en los colegios.
El anuncio del segundo del gabinete de Escocia
El anuncio ha llegado de la mano de John Swinney, segundo de Nicola Sturgeon en el gabinete escocés y responsable de las cuestiones educativas. El gobierno aún no tiene fecha concreta para la implantación del currículo, o un plan de estudios debidamente estudiado y estructurado. Sí quiere comenzar a trabajar «de inmediato» en el mismo para introducirlo en las escuelas más pronto que tarde.
Pese a la ausencia todavía de currículo, la imposición de la doctrina LGBT rotará en torno a vectores conocidos: por un lado, se marcará como objetivo combatir la supuesta intolerancia y la homofobia; por otro, promoverá diversas terminologías, conceptos y corrientes en el seno del movimiento; y por último, versará sobre la historia del lobby, sus luchas y sus conquistas. TIE lo define como «educación inclusiva».
Las palabras de Swinney: «Nuestro sistema educativo debe apoyar a todos para alcanzar su pleno potencial. Por ello es vital que el currículo sea tan diverso como las personas que lo aprenden en nuestras escuelas (…) Las recomendaciones qno sólo mejorarán la experiencia de aprendizaje de las jóvenes personas LGBT, sino que invitarán a todos los alumnos a celebrar sus diferencias, promover el entendimiento y apoyar la inclusión».