Más de medio centenar de personas, concretamente 77, han hecho pública una declaración En defensa de la policía y de las instituciones catalanas como aportación para “contribuir a la paz civil hoy dañada”. Señalan que la violencia, tanto activa, como pasiva, generada por los que impiden la libertad de desplazamiento, y acceso, vulneran los derechos de los catalanes, porque “un principio básico de una sociedad democrática es el respeto a los derechos de los demás”. Expresan su reconocimiento por su actuación a “ la Policia Nacional, la Guardia Civil, y de manera especial a los Mossos d’Esquadra” Piden así mismo al “Parlamento de Cataluña y al Presidente de la Generalitat que actúen de forma responsable, y en bien de todas la instituciones y de la sociedad catalana, y urgen a que se tomen medidas para que la Televisión de Cataluña recupere su carácter de servicio público”.
El texto surgido inicialmente del grupo Converses a Catalunya, estaba pensado para estar apoyado por cincuenta personas exactas, si bien en la práctica las peticiones para firmarlo han elevado el número, que se quería simbólico. El proceso ha durado 3 días. El conjunto son miembros significados de la sociedad catalana sobre todo en el ámbito profesional y cultural.
Firman, entre otros, Jordi Alberich, Daniel Fernádez, Eugenio Gay, Jaime Grego, Josep Miró i Ardèvol, Jaume Lanaspa, Juan José López Burniol, Fèlix Riera, Alfredo Pastor, Xavier Pomés.
Declaración
En defensa de la policía y de las instituciones catalanas
En estos momentos difíciles queremos expresar públicamente nuestra opinión para contribuir a reconstruir la paz civil, hoy dañada.
Lo que más puede erosionar la libertad y deteriorar la democracia es que la convivencia se vea alterada por la violencia y el desorden que ocasiona. Por esta razón, el primer deber de la ciudadanía es rechazarla rotundamente y en todas sus manifestaciones. Tanto la violencia activa, como la pasiva, generada por quienes impiden de forma reiterada y sistemática, el ejercicio del derecho a la docencia y al estudio, el derecho al trabajo y a la libre circulación y acceso.
Y es que el principio básico de una sociedad democrática es el respeto al ejercicio de los derechos de los demás, también de los que discrepamos. Si la democracia no es capaz de garantizarlo deviene inútil y se produce el desastre.
En último término, la instancia responsable de garantizar el ejercicio de los derechos de los ciudadanos es la actuación policial, siempre de acuerdo con las leyes y normas de nuestro estado de derecho. La policía es también la única depositaria del ejercicio legal de la fuerza en cumplimiento estricto de su misión, sin excesos, ni renuncias, en el sentido que, en democracia, la seguridad es un fin en sí mismo, y aún más, un instrumento fundamental para defender la libertad.
También las instituciones, tanto personales como colectivas dependen en último término de su actuación. Muchas ocasiones lo han hecho patente. Basta recordar dos de ellas para ejemplificarlo: el cerco del Parlamento de Cataluña y los intentos de agresión a varios diputados en junio de 2011. Entonces, la institución más importante de Cataluña dependió de los Mossos para garantizar su libertad. También cuando tuvieron lugar los atentados de la Rambla mostraron cómo dependemos de la policía, y cómo podemos confiar en ella.
En los últimos días la Policía Nacional, la Guardia Civil, y especialmente el Cuerpo de los Mossos, institución esencial de nuestro autogobierno, intervinieron para afrontar la violencia organizada. Lo hicieron con profesionalidad y entrega, por lo que queremos manifestar nuestro reconocimiento y agradecimiento.
Como en todo acto humano desarrollado en condiciones penosamente difíciles, se puede haber producido algún caso de exceso en su actuación, que no desvirtúa la positiva calificación global, y que en todo caso, serán los mismos cuerpos policiales los que, en primer término, lo abordarán.
Por la importancia institucional de la policía y por su actuación concreta, es por lo que rechazamos como inapropiados, por irresponsables, los ataques efectuados por una parte del Parlamento de Cataluña, y lo que resulta especialmente grave, por parte del Presidente de la Generalitat. Querer abrir una especie de «causa general» contra la policía es clamorosamente injusto y contrario a las necesidades de Cataluña. Aún lo es más cuando al mismo tiempo el gobierno de Catalunya no ha condenado la violencia en la calle, ni se hace presente en las causas abiertas contra los presuntos inculpados. Estos ataques se han producido y multiplicado también desde la Televisión Pública de Cataluña de manera absolutamente inaceptable.
En conclusión:
1º. Reiteramos nuestro apoyo a las fuerzas de seguridad, y en particular a la policía de Cataluña, por las dificultades añadidas que sufren.
2º. Pedimos al Parlamento y al Presidente de la Generalitat que actúen de manera responsable y en bien de todas las instituciones y del conjunto de la sociedad catalana.
3º. Urgimos medidas para que la TV de Cataluña recupere su carácter de servicio público hoy totalmente perdido.
Llamamos al conjunto de la sociedad catalana a ser proactiva en defensa de la paz civil, el respeto, la concordia; y a nuestras instituciones de autogobierno a velar por su buen funcionamiento y actuar democráticamente para asegurarlo.
Firman este manifiesto:
– Jordi Alberich | – Josep Maria Lloveras |
– Esther Amselem Amselem | – Juan-José López Burniol |
– Francesc Aparicio | – Enrique López Viguria |
– Daniel Arasa | – Juan Martínez de Tejada |
– Jordi L. Bailach | – Margarita Mauri |
– Astrid Barrios | – José M. Mesa |
– Eulalia Baselga Torres | – Javier Mirallas |
– Josep Ramon Bosch | – Josep Miró i Ardèvol |
– Eugeni Bregolat | – Álex Miró Pujadas |
– M. Carmen Bruach | – Pere Mirosa Martínez |
– Ferran Brunet | – Esteban Mogas |
– Vicenç Capdevila Cardona | – Oriol Molins |
– Josep M. Cardellach | – Roger Montañola |
– Jordi Cerdà Aliguer | – Montserrat Nebrera |
– Manuel Conde | – José Luís Oller-Ariño |
– Xavier Cortés Morros | – M. Luz Pardos |
– Carlos Cuatrecasas | – Alfredo Pastor Bodmer |
– Tita Cuyás | – Xavier Pomés |
– Javier Cuyás | – Víctor Pou |
– Carlos de Nadal | – Sílvia Requena |
– Fernando de Salas | – Fèlix Riera |
– Nicolás de Salas | – Núria Rodríguez Olivé |
– Manuel de Tord | – Mario Romeo García |
– José Antonio Díaz Salanova | – Baldiri Ros Prat |
– Ricardo Fernández Déu | – Ricard Santomà i Vicens |
– Daniel Fernández Gutiérrez | – José Emilio Serra de Fortuny |
– Antoni Fernández Teixidó | – Montserrat Serrallonga |
– Santiago Fisas | – Jorge Sierra |
– Joan Josep Folchi | – Manel Silva Sánchez |
– Miquel Galles Magri | – Josep Soler Albertí |
– Carlos Galofre Bofill | – Joaquim Targa |
– Eugeni Gay | – Tomás Testor |
– Javier Gonzalo | – Montse Tiana F. |
– Pere Gotanegra | – Carlos Toda |
– Jaume Grego | – Manuel Toro Coll |
– Jaume Lanaspa | – José M. Torres |
– M. Josep Le Monnier Estany | – Eudald Vendrell Ferrer |
– Ferran Lemus | – Josep Vila Bassas |
– Joaquim Llimona |
1 Comentario. Dejar nuevo
Agraeixo que algunes persones amb seny es pronunciin …Estem patint una manca de democracia espectacular…i un mal social i economic irreversible