La prensa, obcecada por atacar al presidente de los Estados Unidos, el republicano Donald Trump, está omitiendo -quizás deliveradamente- otros episodios de magnitud que se están dando también en el país americano.
La actualidad política y social americana no se resume en lo que pueda hacer o dejar de hacer el máximo dirigente estadounidense y hay otra serie de eventos que pasan desapercibidos, a pesar de su relevancia.
En pocos medios de comunicación españoles, por ejemplo, se ha podido encontrar información sobre la masiva manifestación del pasado 19 de enero en Washington en favor de la vida y contra el aborto.
La denominada «Marcha por la vida», que tiene lugar anualmente, contó en la presente edición con un mensaje del presidente Donald Trump y con la presencia del vicepresidente del país Mike Pence, que recalcó en sus participación que «toda vida tiene sentido».
«Cuando miramos a los ojos de un niño recién nacido -afirmó Trump en su mensaje-, vemos la belleza, el alma humana y la majestuosidad de la creación de Dios. Sabemos que toda vida tiene sentido».
Pence afirmó sobre el mandatario: «El presidente Trump es el presidente más pro-vida de la historia del país. La vida está ganando de nuevo en EEUU».
Una manifestación que mira al Tribunal Supremo
Posteriormente la marcha se dirigió hasta el Tribunal Supremo para pedir allí que los jueces del país aumenten las restricciones legales para el acceso a los servicios de aborto.
«Queremos transmitir gozo por la vida, alguien tiene que hablar por los no nacidos, y defender la vida al 100%», afirmó una joven católica de nombre Sandy, que añadió que con la marcha «buscamos que se prohíba totalmente el aborto, en todos los casos».
En la actualidad, gracias a la reciente incorporación del magistrado a la Corte Suprema, Brett Kavanaugh, existe mayoría conservadora en el Alto Tribunal lo que significaría que existen posibilidades de que el libre aborto sufra un revés en el país y pase a estar prohibido de nuevo.
Cabe preguntarse, finalmente, si los medios españoles informan sobre las concentraciones feministas o del homosexualismo político, ¿por qué reducir el resto del espectro conservador a Trump?
