El Proyecto de Decreto oferta educativa y procedimiento de admisión de la Dirección General de Atención a la familia y a la comunidad educativa del Departamento de Educación, que en su información pública ha finalizado este 6 de febrero, ha recibido numerosas alegaciones por parte de padres y madres, profesorado y escuelas porque limita los derechos de los padres.
Es por eso que e-Cristians ha lanzado una campaña para que las personas que deseen sumarse a la iniciativa envíe un escrito dirigido al presidente de la Generalitat, Joaquim Torra (joaquim.torra@parlament.cat), pidiéndole que intervenga para evitar que progrese este decreto que, en caso de aprobarse, «dañaría de forma grave a toda la escuela concertada», según la asociación.
La propuesta de redactado de la campaña es la siguiente:
Muy Honorable Señor, presidente de la Generalitat,
Le pido que como máxima autoridad del gobierno de Cataluña intervenga para evitar que el Departamento de Educación lleve a cabo el «Decreto oferta educativa y procedimiento de admisión de la Dirección General de Atención a la familia y a la comunidad educativa del Departamento de Educación». Este proyecto de normativa en su fase de información pública ha recibido un volumen extraordinario de alegaciones. Esta reacción se ha producido porque de aplicarse causará un daño irreparable a la escuela concertada, limitando en unos términos inaceptables los derechos de los padres a la educación de sus hijos, y la viabilidad de este modelo de escuela tan ligada a la libertad. Por estas razones le pido Muy Honorable Señor que actúe en bien de Cataluña.
Atentamente,
La defensa de los derechos de los padres
Este hecho es especialmente sensible y grave, ya que está relacionado con la libertad de educación y los derechos de los padres a educar a sus hijos, de acuerdo con sus convicciones morales y religiosas, lo que tiene una de sus más importantes aplicaciones en la existencia de la escuela concertada.
En la carta semanal de Josep Miró i Ardèvol, presidente de e-Cristians, titulada ‘Defendamos los derechos de los padres y la escuela concertada’ afirma que «este modelo de escuela se justifica en función de que su ideario responde a lo que los padres que utilizan sus servicios consideran como más adecuadas para la formación de sus hijos».
«Toda limitación al proyecto de cada centro -prosigue Miró i Ardèvol- es una limitación a los derechos de la familia y de la libertad en el ejercicio de la enseñanza. El hecho de que estén concertados y que por tanto reciban una parte de dinero público (insuficiente en relación al coste de la plaza en la escuela pública), no justifica que los gobiernos puedan operar sobre estos centros como si fueran de su titularidad«.
Y es que el concierto es la concreción de dos derechos, según explica la carta: «el de los padres a la educación de sus hijos y la libertad de constituir centros, y el de la gratuidad de la enseñanza». Si no significaría que el derecho a una escuela gratuita sólo puede ser ejercido en el marco de la escuela pública que por su carácter neutral presenta limitaciones en cuanto a la educación en términos de ideario moral y religioso.
Es por eso que se hace necesario participar de la campaña pidiendo al presidente de la Generalitat que intervenga en esta importante gestión para evitar que progrese un decreto que de aprobarse dañaría de forma grave a toda la escuela concertada.