fbpx

Las comunidades cristianas, golpeadas por el conflicto en Gaza: atacan la parroquia de la Sagrada Familia

Iglesia

COMPARTIR EN REDES

Un escalofriante episodio ha vuelto a sacudir los cimientos de la paz en el conflicto en Gaza. La parroquia latina de la Sagrada Familia en la ciudad de Gaza se ha convertido en el último escenario de la violencia que asola región tras los inexcusables ataques terroristas del pasado 7 de octubre de Hamas contra Israel y la decisión de este último de iniciar una incontrolable incursión militar en Gaza.

Este 16 de diciembre, en un acto que desafía toda comprensión, el ejército israelí ha atacado este santuario religioso, evidenciando una vez más que en este conflicto, nadie, ni siquiera las comunidades cristianas, está a salvo.

El dramático incidente, que se produjo la noche del viernes al sábado y continuó hasta las primeras horas del día, ha resultado en la muerte de dos mujeres, identificadas como madre e hija, y varios heridos. Según informes, la hija fue asesinada mientras intentaba socorrer a su madre anciana, herida previamente por francotiradores. Este acto de violencia se justifica, según fuentes israelíes, por la presunta presencia de un lanzamisiles en la parroquia, según informa Vatican News.

El cardenal Pierbattista Pizzaballa, Patriarca latino de Jerusalén, ha confirmado estas trágicas pérdidas y expresado su profunda consternación, además, ha negado la presencia de armamento en la Iglesia. La comunidad cristiana, preparándose para la Navidad, se encuentra ahora de luto, enfrentando un ataque incomprensible que ha violado no solo su seguridad sino también su sagrado lugar de refugio y oración.

El Papa Francisco ruega por un cese al fuego en Gaza y destaca la sinrazón de la guerra

La respuesta del Patriarcado Latino de Jerusalén, en un comunicado, resalta la incomprensión ante un ataque de tal magnitud en un período tan sagrado. El asesinato a sangre fría de creyentes dentro de la parroquia, un lugar que debería ser un refugio de paz y no un campo de batalla, es una afrenta a la humanidad y a los valores religiosos.

La parroquia de la Sagrada Familia, que ha servido como refugio para unos 600 desplazados durante los últimos dos meses, ha sido escenario de «momentos de pánico», según fuentes internas. La comunidad, especialmente los niños y ancianos, vive en un estado de temor constante, temiendo ser el próximo blanco.

A continuación, un vídeo que sirve de ejemplo de esa tensión y que fue publicado por el obispo de Orihuela-Alicante, monseñor José Ignacio Munilla, el pasado 2 de noviembre, como él mismo indica:

Además, fuentes católicas informan de un ataque adicional durante la noche, donde un disparo de tanque hirió a una mujer en las piernas y causó heridas leves a otras dos personas. Este ataque también dañó el generador eléctrico de la casa de las religiosas de Madre Teresa, quienes, a pesar de las dificultades, continúan su labor con niños discapacitados.

Mientras tanto, los medios de comunicación palestinos informan de intensos bombardeos israelíes en toda la Franja de Gaza, con un saldo mortal que continúa aumentando. Desde el 7 de octubre, Hamás ha declarado más de 18.800 muertos, una cifra difícilmente certificable, pero que refleja la dura realidad de este conflicto prolongado.

Este último ataque contra la parroquia de la Sagrada Familia no es solo un acto de violencia inexcusable; es un símbolo perturbador de cómo la guerra en Gaza ha traspasado todos los límites, afectando a comunidades que siempre han permanecido al margen del conflicto.

¿Te ha gustado el artículo?

Ayúdanos con 1€ para seguir haciendo noticias como esta

Donar 1€
NOTICIAS RELACIONADAS

2 Comentarios. Dejar nuevo

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.

Rellena este campo
Rellena este campo
Por favor, introduce una dirección de correo electrónico válida.

El periodo de verificación de reCAPTCHA ha caducado. Por favor, recarga la página.