Recientemente se ha sabido que hasta 300 centros de educación pública catalanes entre colegios e institutos incluirán a partir de este curso un programa piloto sobre educación sexual y afectiva, que propagará la ideología de género, según informó la Conselleria de Educación de la Generalitat de Cataluña.
El programa, que pretende introducir en los niños la ideología de género, se llama “Coeduca’t” y para el curso 2012-2022 se quiere introducir en el resto de colegios públicos de la Comunidad autónoma.
La Conselleria ha asegurado que, aunque los contenidos aún no se han hecho públicos, se permitirá hacer tutorías en grupo e individuales sobre sexualidad. Además, los colegios podrán desarrollar actividades extraescolares y visitas fuera del colegio que ayuden a consolidar ese enfoque sobre la sexualidad. Cabe preguntarse a qué lugares y qué tipo de cursos contendrá este extremo.
Lo que está claro es que, entre los contenidos, habrá un apartado del autoconocimiento que lleve a los jóvenes a plantearse su sexualidad. Además, incorporará los denominados «derechos sexuales y reproductivos», que no es otra cuestión que la divulgación de métodos anticonceptivos y presentar al aborto como uno de los mismos cuando, evidentemente, no lo es.
La educación sexual no está regulada a nivel estatal. La LOMCE, la ley educativa vigente, no la contempla en ninguno de sus apartados. Isabel Celaá, ministra de Educación en funciones, aseguró durante el invierno pasado que el Gobierno trabajaba para incluirla en el currículo de una futura ley educativa.
Cataluña no es la primera comunidad en impartir iniciativas educativas en materia de educación afectivo-sexual. En 2018, la Comunidad Foral de Navarra creó Skolae: un programa dirigido a todas las etapas educativas, Infantil inclusive, que implementa la educación sexual de forma transversal a través de todas las asignaturas escolares.
El Govern de esta manera tiene la excusa perfecta para inocular las ideas promovidas por el homosexualismo político en los más jóvenes y desplegar así una ingeniería social a su imagen y semejanza.
El problema de esta iniciativa es que colisiona frontalmente con el derecho constitucional de los padres españoles de escoger la educación de sus hijos sin afectaciones ideológicas determinadas que un color político quiera implementar.
¿El derecho de los padres o la imposición de la ideología de género?
En este sentido, los días 15, 16 y 17 de noviembre tendrá lugar el 21 Congreso Católicos y Vida Pública con el título ‘Libertad para educar, libertad para elegir’.
Durante estos tres días, el Congreso profundizará en el derecho de los padres a elegir la educación de sus hijos, conocer otras realidades educativas y denunciar aquellas situaciones en las que no se respeta la libertad de los padres en el ámbito de la enseñanza. En definitiva, el objetivo es concienciar a la sociedad en torno a este derecho, tan vulnerado en buena parte del mundo, ahora también en Cataluña.
Fundamentos de la libertad de educación, factores de desigualdad a la hora de elegir un centro, el papel de la escuela católica en la evangelización, la inclusión real en la educación u otros sistemas educativos diferentes al español son algunos de los temas que se abordarán en este encuentro que se celebrará en el Campus de Moncloa de la Universidad CEU San Pablo en Madrid.
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«Todo aquél que escandalizare a uno de estos pequeños, más le valdría que le atasen una rueda de molino al cuello y le tirasen al mar»
Los padres de las actuales generaciones de niños y jóvenes tienen un cometido que cumplir: «El lobo se quiere meter en la escuela»
Por qué los cristianos no somos más luchadores ? Podemos empezar por nuestros pastores. Antes parecía que nada más existía el 6º mandamiento, pero ahora ¿quién predica sobre la castidad, o sobre todo lo que ataca a la familia? Parece que siempre se ha de ser políticamente correcto para no ser acusado de fundamentalista y es entonces cuando el fundamento cae y destroza el edificio.