La aceptación o rechazo de los musulmanes en Europa Occidental genera opiniones encontradas entre la población en función del planteamiento que hacen las encuestas. Así, el pasado 24 de julio, el Pew Research Center publicaba un estudio que concluía que conocer personalmente a un musulmán genera una opinión positiva hacia su religión.
Más recientemente, otro estudio de este mismo centro de investigación, ‘Eastern and Western Europeans Differ on Importance of Religion, Views of Minorities, and Key Social Issues’ (‘Los europeos orientales y occidentales difieren en la importancia de la religión, los puntos de vista de las minorías y las cuestiones sociales clave’), mostraba la división a la hora de aceptar a un musulmán como miembro de la familia entre ciudadanos de Europa Occidental y los de Europa Central y Oriental.
Otras cuestiones como la religiosidad y la creencia en Dios entre los europeos, o lo que piensan sobre el matrimonio gay y el aborto, también eran analizadas en el mismo estudio
El informe, publicado el pasado 29 de octubre, es el resultado de encuestas realizadas a casi 56.000 adultos en 34 países europeos entre 2015 y 2017.
Ni en la familia ni como vecino
Respecto a la actitud hacia los musulmanes y judíos, “en comparación con los europeos occidentales, menos europeos centrales y orientales los acogerían en sus familias o vecindarios”, señalan los responsables del estudio.
De hecho, “en casi todos los países de Europa Central y Oriental encuestados, menos de la mitad de los adultos dicen que estarían dispuestos a aceptar a los musulmanes en su familia”, como se puede observar en el siguiente mapa, reproducido a partir del estudio.
En sentido contrario, en el mapa se puede ver que “en casi todos los países de Europa Occidental encuestados, más de la mitad dice que aceptaría a un musulmán en su familia”.
Los países más tolerantes ante esta cuestión son Holanda, donde el 88% de los encuestados “estaría dispuesto a aceptar a los musulmanes como miembros de su familia”, Noruega (82%), Dinamarca (81%), Suecia (80%), Bélgica (77%), España (74%) y Portugal (70%).
Por debajo del 70% se sitúan otros países del entorno español como Francia (66%), Alemania (55%), Reino Unido (53%) y, algo más alejado, Italia (43%).
En el otro extremo, el país más opuesto a incluir musulmanes en su familia es Armenia, con solo el 7% a favor. Por detrás, República Checa (12%), Bielorrusia y Lituania (16%), Georgia (17%), Letonia (19%) y Hungría (21%).
“Una división similar surge entre Europa Central / Oriental y Europa Occidental con respecto a la aceptación de judíos en la familia”, añaden las conclusiones del informe.
Por otra parte, las encuestas incluían una pregunta sobre la aceptación o rechazo de los musulmanes como vecinos.
Al respecto, “los europeos occidentales también son mucho más propensos que sus contrapartes de Europa Central y del Este a decir que aceptarían a los musulmanes en sus vecindarios”.
“Por ejemplo, el 83% de los finlandeses dicen que estarían dispuestos a aceptar a los musulmanes como vecinos, en comparación con 55% de los ucranianos. Y aunque la división es menos clara, es más probable que los europeos occidentales expresen aceptación hacia los judíos en sus vecindarios”, agrega el estudio.
Lo que piensan los jóvenes
Además, el estudio analiza también la opinión de los jóvenes en relación a estas cuestiones y, “cuando se trata de opiniones sobre musulmanes y judíos, los adultos jóvenes en la mayoría de los países de Europa Central y del Este no los aceptan más que sus mayores”, como se ve en el gráfico de la derecha.
“En consecuencia, aquellos en esta generación más joven en Europa Central y del Este son mucho menos propensos que sus compañeros en Europa Occidental a expresar su apertura a tener musulmanes o judíos en sus familias”, agrega el informe.
En este caso, de nuevo Holanda, con un porcentaje aún superior al del mapa anterior, es el país más tolerante, con un 94% de encuestados jóvenes a favor. Y otro tanto pasa con los mismos países que antes, los porcentajes son superiores: Noruega y Dinamarca (90%), Suecia (88%), Portugal (87%), y España y Bélgica (86%).
El porcentaje entre los jóvenes franceses es del 67%; entre los alemanes, el 63%; los italianos, el 56%; y los británicos, el 48%.
También vienen a repetirse en el caso de los jóvenes, como en el mapa, los países contrarios a acoger a un musulmán como miembro de la familia, con apenas variación en los porcentajes: Armenia (7%), República Checa (16%, Georgia (17%), Bielorrusia (19%), Letonia (24%), Lituania (25%); y Ucrania (26%).
“Por ejemplo, el 36% de los adultos polacos menores de 35 años dicen que estarían dispuestos a aceptar a los musulmanes en su familia, muy por debajo de los dos tercios de los adultos jóvenes franceses que dicen que estarían dispuestos a tener musulmanes en su familia”, concluye como ejemplo el estudio.