El Juzgado de Instrucción nº6 de Alcalá de Henares (Madrid) ha dado la razón a la familia de una enferma terminal que sufre una enfermedad neurodegenerativa. La familia sostenía que María Teresa Blanco «no está sufriendo» y quiere vivir, por contra, los médicos querían no reanimarla si entraba en parada cardiorespiratoria.
Ahora, la justicia obliga al Hospital Universitario Príncipe de Asturias de Alcalá de Henares (HUPA) a reanimar a la paciente si fuera necesario.
La mujer sufre ataxia neurodegenerativa desde hace 20 años (ahora tiene 54) y siempre ha manifestado su deseo de vivir y de seguir luchando por su vida. Sus hermanos están defendiendo ante el hospital esa intención de la afectada.
El hospital, sin embargo, se negó a su reanimación en contra de la opinión de los familiares y de la propia paciente. Abogados Cristianos, en representación de la familia, ha solicitado al juzgado las medidas cautelares para obligar al Hospital a mantener con vida a la mujer, lo cual ahora ha sido confirmado por la magistrada.
«No existe razón o justificación, estrictamente médica», afirma la jueza
En el auto al que ha tenido acceso la prensa, tras la valoracion de la Médico Forense adscrita a este Juzgado y de la información médica remitida por el HUPA, se concluye que «se trata de una paciente con deterioro basal severo física y psíquicamente con dependencia total para todas las actividades básicas de la vida diaria».
En el auto la jueza apunta que la paciente se encuentra «estable clínicamente», por lo que «no existe razón o justificación, estrictamente médica para dejar de aplicar el tratamiento correspondiente, en su caso, RCP, al momento en el que la paciente lo pudiera necesitar«.
Los familiares han asegurado a Europa Press que desde el hospital se les ha dejado de informar «del estado de salud de la paciente por lo que temen por la vida de la mujer», afirmando que desde el centro se les han mencionado «el alto coste económico que supondría mantenerla con vida».
La presidenta de Abogados Cristianos, Polonia Castellanos, ha recordado que «hace sólo unos días, en este mismo hospital, ha habido una condena a una trabajadora por el asesinato de una paciente y hubo sospechas de que no era un caso único» en alusión a la auxiliar condenado por el asesinato de una paciente.
España se encuentra sumida en pleno debate por la posible aprobación en el Parlamento de los diputados de la propuesta de Ley socialista que legalizaría la eutanasia.
Casos como este demuestran la situación de indefensión en la que se encontrarían numerosos pacientes ante las decisiones de médicos que no se alinean con sus convicciones. Un riesgo que la nueva Ley acentuaría y legitimaría legalmente.
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Bien por esa juez justa y valiente.