La corroboración es la confirmación. El Sacramento de la Confirmación corrobora el Sacramento del Bautismo. El libro bíblico Hechos de los Apóstoles del evangelista San Lucas pertenece al Nuevo Testamento. Lo escribió durante el cautiverio de San Pablo en Roma. El Capítulo 8 nos refiere la existencia de este Sacramento de la Confirmación.
<<Cuando los apóstoles que estaban en Jerusalén oyeron como había recibido Samaria la palabra de Dios, enviaron allá a Pedro y a Juan, los cuales, bajando, oraron sobre ellos para que recibiesen el Espíritu Santo, pues aún no había venido sobre ninguno de ellos; sólo habían sido bautizados en el nombre del Señor Jesús. Entonces les impusieron las manos y recibieron el Espíritu Santo>> Act 8, 14-17
La conversión de Saulo (San Pablo) se relata a continuación en el capítulo 9. Los Santos Padres de la Iglesia hablan de este Sacramento. La Materia de la Confirmación es el crisma consagrado por el Obispo. La Forma es la imposición, sobre la cabeza del confirmando, de la mano derecha con el dedo pulgar mojado previamente en crisma y señal de la cruz en la frente. Ministro es el Obispo diocesano o ministro autorizado por el Obispo en algunos casos. Sujeto es todo bautizado que accede a este Sacramento.
En condiciones ordinarias de militancia cristiana (las de mi vida) la Confirmación tiene lugar en la niñez con uso de razón, antes de la Primera Comunión a ser posible o poco después. En condiciones ordinarias actuales habituales, después de la Primera Comunión ya no hay una segunda. De ahí que el Sacramento de la Confirmación se de en personas jóvenes entradas en años, especialmente si hay Matrimonio a la vista. ¡Qué pena que sea así y al mismo tiempo qué gozo!
Si los Santos Padres de la Iglesia creen en este Sacramento y hablan de él, ¿por qué su negación por parte de figuras egregias del denominado Protestantismo después de la Edad Media?