No todos valemos para lo mismo. Unos valen para unas cosas, otros valen para otras. Las capacidades de las personas son diversas… unos valen para los negocios, otros para el arte, otros para la ciencia, otros para el deporte…lo cierto es que todos valemos para algo. Conviene por tanto desvelar nuestras capacidades para que den sus frutos. También veremos nuestras limitaciones, que en la medida de lo posible, conviene superarlas. Eso no siempre será posible, pero entre capacidades y limitaciones, entre éxitos y fracasos, va fluyendo nuestra vida, en medio de un entorno que nos invita a no parar, pero conviene hacer una parada, para escuchar el grito del mundo, que clama por dos cosas: Paz y justicia. Justicia en la distribución de la riqueza, justicia en el respeto de las personas y los pueblos. Si esto fuera así, la paz vendría por si sola. Si aparcamos los miedos y confiamos en un proyecto de fraternidad universal, que conduzca a un mundo unido en su diversidad, respetando a los otros países como al propio, respetando a las otras culturas como a la propia, respetando a las otras religiones como a la propia, y firmemente convencidos de nuestras convicciones, y confiando que el diálogo es la herramienta mas eficaz para construir la paz, que cualquier forma de violencia, dejamos la puerta abierta a la construcción de un mundo nuevo. He ahí donde hemos de poner todas nuestras capacidades. La palabra «Esperanza» quiere decir que hemos de estar profundamente convencidos de que esto puede ser realidad.
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EL MUNDO BUSCA LA PA Y LA JUSTICIA PERO NO LA ENCUENTRA-OH SEÑOR-333 TE ROGAMOS POR LA PAZ Y LA JUSTICIA DEL MUNDO-AMN-EN JESUS-333-ALELUYAH
Felicitaciones… excelente reflexión…. saludos