Un reciente informe de Global Christian Relief ha revelado que Nigeria se posiciona como el país más mortífero del mundo para los cristianos. Entre 2022 y 2024, cerca de 10.000 cristianos fueron asesinados en el país, una cifra alarmante que refleja la gravedad de la persecución religiosa en esta región.
La realidad de la persecución
Según la Lista Roja 2025 publicada por esta organización humanitaria, los cristianos en Nigeria son víctimas frecuentes de grupos extremistas islámicos y de conflictos con pastores armados de origen islámico. Estas agresiones se concentran principalmente en los estados del norte, regidos por la sharia, donde las comunidades cristianas suelen habitar en aldeas remotas y vulnerables.
El informe destaca que, a pesar de las promesas del gobierno nigeriano de controlar a los extremistas, la violencia no solo persiste, sino que aumenta. «Las sombrías estadísticas de Nigeria no tienen parangón», enfatiza el documento.
Uno de los episodios más recientes ocurrió el pasado 7 de enero, cuando dos monjas católicas de las Hermanas del Inmaculado Corazón de María fueron secuestradas mientras regresaban de una reunión. Este tipo de incidentes ejemplifica la creciente inseguridad a la que se enfrentan los cristianos en el país.
Expansión de la violencia en el sur
Tradicionalmente, la persecución se había limitado al norte del país, pero el Washington Times informó que esta amenaza se está extendiendo al sur de Nigeria. En esta región, donde predominan los agricultores cristianos, la migración de pastores fulani armados debido a los cambios ambientales ha intensificado los conflictos.
Nigeria no está sola en esta crisis. Otros países africanos como la República Democrática del Congo, Mozambique y Etiopía se encuentran entre los más peligrosos para los cristianos, ocupando el segundo, tercer y cuarto lugar respectivamente en el ranking de asesinatos relacionados con la persecución religiosa.
Fuera de África, países como India y China también presentan altos niveles de persecución, aunque en formas distintas. En India, se registraron cerca de 5.000 ataques contra hogares e iglesias cristianas, mientras que en China más de 1.500 cristianos fueron arrestados entre 2022 y 2024.
A pesar de estas circunstancias, los cristianos han demostrado una notable fortaleza. Brian Orme, director ejecutivo interino de Global Christian Relief, afirmó que «incluso en las circunstancias más oscuras, la Iglesia no solo sobrevive sino que se fortalece: millones de personas eligen seguir a Jesús a pesar de conocer los riesgos a los que se enfrentan».
La comunidad internacional ha sido criticada por su inacción frente a esta crisis.
Ni el gobierno federal de Nigeria ni las potencias extranjeras han tomado medidas significativas para moderar la persecución.
La situación en Nigeria es un recordatorio de la situación extrema a la que enfrentan millones de cristianos en el mundo. Aunque las cifras son alarmantes, la resiliencia y la fe de estas comunidades muestran una fuerza inquebrantable ante la adversidad.