fbpx

Los obispos de Estados Unidos defienden la libertad religiosa como derecho fundamental e inalienable

Iglesia

COMPARTIR EN REDES

El derecho a la libertad religiosa, descrito como una «síntesis y cumbre de todos los demás derechos fundamentales», es un derecho humano imprescindible para la dignidad humana y el bien común. En consonancia con esta realidad, la Conferencia de Obispos Católicos de los Estados Unidos (USCCB) emitió una declaración en respuesta al reciente informe de Ayuda a la Iglesia Necesitada (ACN), que resalta que cerca de 4.9 mil millones de personas en 61 países sufren violaciones a este derecho básico.

Esta declaración enfatiza la importancia de la libertad religiosa en el contexto global y reafirma el compromiso de la Iglesia con la dignidad de cada persona.

La libertad religiosa: derecho humano y base de todos los derechos

La libertad religiosa no es solo un derecho más, sino un derecho que sustenta y enmarca la totalidad de los derechos humanos.

El Papa Francisco, al igual que sus predecesores, ha señalado que la libertad de religión no es solo «básica» y «primaria», sino un bien que la sociedad debe promover activamente. La USCCB, bajo esta enseñanza, afirma que la libertad religiosa permite a las personas ejercer su conciencia y practicar su fe sin temor, protegiendo no solo a los cristianos, sino a todas las religiones.

La declaración de los obispos estadounidenses responde al informe de ACN, que, en su monitorización de 196 países, denuncia casos graves de persecución y restricciones a la libertad religiosa en contextos diversos, desde leyes de blasfemia en Pakistán hasta la represión estatal en Irán.

En Pakistán, las leyes de blasfemia impulsan una persecución casi letal, como han demostrado los recientes asesinatos de cristianos acusados injustamente de violar tales leyes. 

En Irán, un converso cristiano fue sentenciado a 15 años de prisión por cargos de «propaganda» simplemente por expresar su fe. 

La represión de la libertad religiosa es mucho más que una infracción política o un asunto de legislación injusta. Tal y como sucede en Nigeria, la persecución adopta un rostro genocida contra comunidades cristianas enteras, amenazando con eliminar tradiciones religiosas y culturales que han existido durante generaciones. El obispo local Wilfred Chikpa Anagbe de Makurdi denuncia estas masacres, calificándolas como un intento deliberado de «genocidio» con el fin de reemplazar culturas indígenas y cristianas con otras doctrinas o ideologías políticas.

La defensa católica de la libertad religiosa en el Magisterio de la Iglesia

En su encíclica Dignitatis Humanae, el Concilio Vaticano II establece que «el derecho a la libertad religiosa tiene su fundamento en la dignidad misma de la persona humana». Este documento establece que todos los seres humanos, independientemente de su contexto cultural o religioso, tienen el derecho intrínseco de buscar la verdad y de adherirse a ella según su conciencia.

Esta enseñanza remarca la idea de que la libertad de religión es un pilar fundamental para la paz y la estabilidad social. Los obispos americanos, en su reciente declaración, hacen eco de esta enseñanza y abogan por que se respeten los derechos de todos los individuos y comunidades a profesar y practicar libremente sus creencias.

La misión de la Iglesia

La USCCB, en su esfuerzo por apoyar la Comisión de los Estados Unidos para la Libertad Religiosa Internacional (USCIRF), se ha comprometido a monitorear y denunciar las graves violaciones de derechos humanos en países como China, Rusia e Irán.

Esta misión no solo es una responsabilidad política, sino un acto de fe que refuerza el compromiso de la Iglesia con aquellos que sufren la persecución.

Además de esta denuncia pública, la Iglesia promueve la oración constante por los perseguidos, recordando que en cada martirio y en cada acto de resistencia en la fe, Cristo acompaña y consuela. La Iglesia pide a todos los fieles que oren y aboguen por aquellos que viven en circunstancias de opresión religiosa.

Pues la defensa de la libertad religiosa no es solo un deber moral, sino un acto de amor hacia Dios y hacia la humanidad misma.

La defensa de la libertad religiosa no es solo un deber moral, sino un acto de amor hacia Dios y hacia la humanidad misma. Share on X

¿Te ha gustado el artículo?

Ayúdanos con 1€ para seguir haciendo noticias como esta

Donar 1€
NOTICIAS RELACIONADAS

1 Comentario. Dejar nuevo

  • Fernando Pascual
    30 octubre, 2024 12:55

    Un saludo y gracias por el tema. Un detalle: «Dignitatis humanae» no es encíclica, sino declaración. Gracias de nuevo.

    Responder

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.

Rellena este campo
Rellena este campo
Por favor, introduce una dirección de correo electrónico válida.

El periodo de verificación de reCAPTCHA ha caducado. Por favor, recarga la página.