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Bolaños propone en el Vaticano una salida «consensuada» de los benedictinos del Valle de los Caídos

Iglesia

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En los últimos años, la presión para resignificar el Valle de los Caídos ha aumentado, especialmente con la aprobación de la Ley de Memoria Democrática por parte del gobierno de Pedro Sánchez. Ahora, el Ejecutivo ha intensificado sus esfuerzos para reformar el complejo y forzar la salida de los monjes benedictinos que habitan en la Basílica.

En un reciente viaje al Vaticano, Félix Bolaños, aprovechó un encuentro con el Papa Francisco y otros representantes eclesiásticos para abordar la cuestión.

El ministro reiteró la «más absoluta predisposición» del gobierno para alcanzar un acuerdo con la Iglesia respecto al cumplimiento de la Ley de Memoria Democrática. Este diálogo busca un consenso que permita la salida de los benedictinos del Valle de los Caídos, un elemento clave en los planes del Gobierno para la «resignificación» del lugar.

El Gobierno y su obsesión con la resignificación del Valle

La postura del Gobierno de Sánchez respecto al Valle de los Caídos ha sido clara desde el principio: transformar el significado del lugar para despojarlo de su vinculación con el franquismo.

La Ley de Memoria Democrática, aprobada en 2022, es el principal instrumento legal que busca abordar esta tarea. Esta normativa prevé la «resignificación del Valle de Cuelgamuros» como un espacio dedicado a la memoria democrática, lo que supone no solo la exhumación de Franco en 2019, sino también la retirada de cualquier elemento que perpetúe el «homenaje al dictador». En este sentido, los monjes benedictinos, que han custodiado el lugar desde su inauguración en 1959, se consideran un obstáculo para estos planes.

La Iglesia y la búsqueda de un acuerdo

Durante su visita al Vaticano, Bolaños se reunió con el presidente de la Conferencia Episcopal, Luis Argüello, y otros altos cargos eclesiásticos, incluidos el cardenal de Barcelona, Juan José Omella.

En este encuentro, el ministro expuso el deseo del gobierno de «alcanzar consensos» con la Iglesia. Aunque la Iglesia ha mostrado apertura al diálogo, la cuestión de la salida de los benedictinos sigue siendo un tema delicado.

La posición de la Iglesia ha sido moderada hasta ahora, buscando mantener su presencia en el Valle de una manera que no contravenga la legislación vigente. Sin embargo, la Ley de Memoria Democrática impone la necesidad de una «nueva presencia eclesial» en el complejo, lo que podría implicar la sustitución de los benedictinos por otra orden religiosa o un enfoque completamente diferente Este es uno de los puntos clave en las negociaciones entre el Gobierno y la Iglesia.

¿Hacia dónde va el Valle de los Caídos?

El futuro del Valle de los Caídos sigue siendo incierto, pero lo que está claro es que el Gobierno de Pedro Sánchez está decidido a seguir adelante con su plan de resignificación. La salida de los benedictinos es un paso fundamental en este proceso, y el Ejecutivo ha intensificado sus esfuerzos para llegar a un acuerdo con la Iglesia en este sentido. Sin embargo, las negociaciones no serán fáciles, ya que la cuestión del Valle de los Caídos involucra no solo aspectos legales y religiosos, sino también el delicado tema de la memoria histórica en España.

Lo que está en juego no es solo el destino de un monumento, sino también la historia de España.

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