El tema de la fecundación in vitro (FIV) ha cobrado una relevancia renovada tras una decisión judicial en Alabama que redefine el estatus de los embriones congelados como niños no nacidos. Esta decisión ha provocado un intenso debate sobre los derechos legales y éticos de los embriones y ha generado repercusiones en todo el país, especialmente en estados como Texas.
El gobernador de Texas, Greg Abbott, ha anunciado que el estado considerará este debate a la luz de la reciente decisión de la Corte Suprema de Alabama. En una entrevista, Abbott enfatizó el compromiso de Texas con su posición pro-vida y su deseo de fomentar un aumento en el nacimiento de niños en el estado.
La decisión de la Corte Suprema de Alabama surgió en respuesta a dos demandas que presentaron unas parejas por la muerte de sus embriones congelados. Pues fueron destruidos en un accidente en una clínica de reproducción. El juez Jay Mitchell, en su fallo, resaltó que los bebés no nacidos son legalmente considerados como niños, independientemente de su etapa de desarrollo o ubicación. Este dictamen ha llevado a la suspensión de tratamientos de FIV en varias instituciones médicas de Alabama y ha planteado preguntas fundamentales sobre la naturaleza y los derechos de los embriones congelados.
Abbott ha citado los comentarios del expresidente Donald Trump sobre el tema, destacando el objetivo de facilitar a las personas concebir hijos mediante FIV. Trump, en una publicación en Truth Social, prometió el apoyo del Partido Republicano a procedimientos de fertilidad como la FIV, enfatizando la importancia de las familias saludables y la disponibilidad de tales terapias en todo el país.
Aunque la Iglesia condena toda técnica que sustituya el acto conyugal como generador de la vida el hecho de que se empiece a reconocer a los embriones congelados como lo que son , bebés, es un paso importante en favor del respeto y salvaguarda de la vida y dignidad de la persona.
“El ser humano debe ser respetado y tratado como persona desde el instante de su concepción y, por eso, a partir de ese mismo momento se le deben reconocer los derechos de la persona, principalmente el derecho inviolable de todo ser humano inocente a la vida”. (Instrucción Donum vitæ)
El gobernador de Texas ha respaldado la postura de Trump, subrayando la importancia de la FIV para permitir que los padres que luchan contra la infertilidad tengan hijos. Abbott ha enfatizado la importancia de asegurar el acceso a la FIV para las personas que buscan comenzar o expandir sus familias, lo cual está alineado con el objetivo general de promover la formación de familias estadounidenses.
Trump también ha instado a la Legislatura de Alabama a actuar rápidamente para preservar la disponibilidad de FIV, en consonancia con la postura pro-vida del Partido Republicano y el respaldo a iniciativas centradas en la familia.
A día de hoy, el debate sobre la FIV y el estatus legal de los embriones congelados continúa siendo un tema candente en la política estadounidense, especialmente en estados como Texas y Alabama.
