Religioso y mártir (1882-1936)
Natural de Leoz (Navarra), nació en 1882. De familia muy cristiana, Pablo dio ejemplo de laboriosidad y caridad. A los 25 años decidió hacer fortuna en América. Le impresionó la vida pasionista de su hermano Cecilio y suspendió ese proyecto para consagrarse a Dios como religioso. Profesó en Gaviria en 1909. Trabajó varios años en Corella (Navarra) y después en Daimiel (Ciudad Real). En 1927 se trasladó a Zaragoza para organizar la vida del colegio. Se dedicaba a la búsqueda de limosnas por los pueblos. Llamaba la atención la bondad en el trato, la humildad y la devoción a la Virgen María. Desde la expulsión del convento, estuvo con el P. Juan Pedro Bengoa en una pensión de Ciudad Real; trabajaba como zapatero para ayudarse en los gastos. El 24 de septiembre de 1936 fueron llevados a Carrión de Calatrava y fusilados el 25. Sus restos reposan en la abadá de la Santa Cruz del Valle de los Caídos (Madrid).