ForumLibertas ha iniciado el especial informativo «De Zapatero a Sánchez». Una serie que sirve para repasar la ingeniería social basada en unas leyes que atentan contra la dignidad humana, la vida y la igualdad entre todas las personas, que se iniciaron con la Presidencia de José Luis Rodríguez Zapatero y que prosigue la de Pedro Sánchez.
Esas leyes de las que ha ido haciendo seguimiento este ForumLibertas empezaron con la Ley orgánica contra la violencia de género y prosiguen en la actualidad con leyes como la de la reforma del aborto y la conocida como ‘Ley trans’. Esa ingeniería social se ha apoyado en leyes que han desconectado al ser humano de su naturaleza y a la sociedad de la convivencia y el consenso.
Estas Leyes hacen de España una anomalía en el panorama Occidental. La razón es que leyes como la del aborto, la eutanasia, la igualdad de género, la del matrimonio homosexual, la de violencia de género, la de antidiscriminación LGTBI, y otras muchas, se pueden ir encontrando en diferentes países en mayor o menor medida. Sin embargo, solamente España las ha aprobado todas constituyendo un país profundamente guiado por las ideologías relativistas que han irrumpido con fuerza en el siglo XXI.
Hoy repasamos la Ley que legalizó el mal llamado matrimonio homosexual en España con la posibilidad de que las parejas del mismo sexo adopten. Lo cual la constituyó una de las más radicales del panorama occidental.
La ruptura natural: Ley 13/2005 de modificación del Código Civil en materia de derecho a contraer matrimonio
En España el matrimonio entre personas del mismo sexo es legal desde el 3 de julio de 2005 por la entrada en vigor de la Ley 13/2005, por la que se modificó el Código Civil en materia de derecho a contraer matrimonio
Un Parlamento español estrechamente dividido legalizó el matrimonio entre personas del mismo sexo en 2005, garantizando derechos idénticos a todas las parejas casadas, independientemente de su orientación sexual.
La nueva medida agregó lenguaje al estatuto matrimonial existente, que ahora dice: «el matrimonio tendrá los mismos requisitos y resultados cuando las dos personas que entren en el contrato sean del mismo sexo o de diferentes sexos».
Desde el Vaticano y la Conferencia Episcopal Española Española se criticó fuertemente la ley, y grandes multitudes se manifestaron en Madrid a favor y en contra de la medida.
Una de los puntos más controvertidos de la Ley es que permitía y permite a las personas del mismo sexo a adoptar niños, algo que fue duramente criticado, ya que sobrepone unos supuestos derechos de ser padres a parejas que biológicamente no pueden serlo al derecho real de un niño a tener un padre y una madre.