Un grupo de expertos mundiales ha alertado de que la decisión del primer ministro británico Boris Johnson de poner fin a todas las restricciones por la pandemia de la Covid-19 a partir del 19 de julio supone «una amenaza para el mundo» a causa de las probabilidades de que se desarrollen nuevas variantes del virus.
Recientemente el numero de casos diarios de Covid en Reino Unido ha superado los 50.000. Más importante, el número de muertos diarios está también al alza desde hace ya más de un mes, alcanzando los 49 a finales de la semana pasada.
Actualmente el Reino Unido es el tercer país del mundo (según las cifras oficiales de los gobiernos) en número total de casos activos de Covid, tan solo superado por Indonesia y Brasil. Por si fuera poco, se estima que el núero diario de casos de Covid podría ascender a los 100.000 en cuestión de días.
La prensa sensacionalista británica insiste en referirse al 19 de julio como el «Día de la Libertad»
Todo esto a pesar de haber inyectado ya más de 120 dosis de vacunas por cada 100 habitantes. El 53% de la población británica ya está totalmente vacunada y el 70% ha recibido al menos una inyección, según las cifras del Financial Times.
La prensa sensacionalista británica insiste en referirse al 19 de julio como el «Día de la Libertad«. El ministro de sanidad Sajid Javid ( infectado de Covid recientemente) declaró a pesar de todo que el gobierno no se planteaba hacer marcha atrás, aunque fuentes gubernamentales han admitido más recientemente que ciertas medidas podrían volver a ser necesarias.
Una «cumbre internacional de emergencia»
Mientras tanto, un grupo de científicos británicos organizó un evento online bautizado como «cumbre internacional de emergencia» para denunciar el fin de las restricciones. En él participaron diversos asesores y ex-asesores de los gobiernos de Nueva Zelanda, Italia, Israel, África del Sur, Australia y Taiwan.
Los participantes firmaron un documento en el que denunciaron que la medida tendría un «profundo impacto dañino para Inglaterra». También advirtieron que el hecho de que el Reino Unido sea una de los hubs aéreos más importantes del mundo facilitaría la expansión de nuevas variantes.
Johnson ha estado bajo presión constante de su partido para levantar las últimas restricciones. Fuentes de su gobierno apuntan que más vale sufrir una nueva ola en verano, cuando la presión en los hospitales es menor, que en invierno.
Es cierto que la campaña de vacunación ha permitido fragilizar mucho el vínculo entre el número total de casos nuevos y el de casos graves que requieren de ingreso en el hospital.
Las proyecciones actuales apuntan que en caso de reapertura total este verano, las hospitalizaciones podrían alcanzar la cifra diaria de 2.000. Una cantidad que equivale a la mitad de las registradas durante la ola de Covid que afectó al Reino Unido el pasado enero, y por lo tanto en principio manejable.
La combinación de factores que presenta el Reino Unido este verano, con una de las poblaciones más vacunadas de Europa y al mismo tiempo con el mayor número de nuevos casos, puede ofrecer un valioso caso de estudio para entender mejor cómo evoluciona la pandemia.
Alcanzar el mayor grado posible de inmunidad colectiva mediante una combinación de vacunación e infecciones
La apuesta de Johnson y de los conservadores británicos es alcanzar el mayor grado posible de inmunidad colectiva mediante una combinación de vacunación e infecciones. El tiempo dirá si esta política poco ortodoxa surge efecto.
En cualquier caso, la experiencia británica del pasado invierno, que pudo facilitar la aparición de la variante Alfa en el sur de Londres, indica que la estrategia de reapertura incondicional conlleva graves riesgos de aparición de nuevas variantes.
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