La ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, ha anunciado que se prevé extender el plazo de los ERTE. En este sentido, Los líderes de las patronales, Antonio Garamendi por la CEOE y Gerardo Cuerva por Cepyme, y el de la UGT, Pepe Álvarez, le han reclamado a la ministra que se establezca un nuevo plazo hasta la primavera del próximo año.
“Desde que terminó el periodo de hibernación, la economía española se ha ido recuperando. Es una recuperación irregular, por sectores, pero esa forma de V asimétrica es lo que se está produciendo”, dijo este jueves a Antena 3 tras subrayar que la pandemia ha causado una “caída intensa, pero temporal” del PIB. En el segundo trimestre, el momento más duro del confinamiento, la actividad se desplomó un histórico 18,5% tras acumular una caída del 5,2% entre enero y marzo,
De momento está muy claro que ciertos sectores, con el turismo a la cabeza, tienen asegurada la continuidad de sus Ertes. Se comprometió el presidente de Gobierno, Pedro Sánchez, en Baleares. No será el único sector. Entraría también el comercio y restauración -servicio de comidas y bebidas-. La ministra señaló que son 700.000 los trabajadores que siguen acogidos a esta herramienta y ha dicho que estos trabajadores «están localizados en sectores muy concretos».
Su homólogo en Seguridad Social, José Luis Escrivá, ha avanzado durante el mes de agosto cuáles podrían ser esos sectores. A 10 de agosto, había seis sectores que tenían más de un 15% del total de sus afiliados a la Seguridad Social en Erte (Agencias de viaje 45%, Transporte aéreo 42%, Alojamiento 37%, Actividades artísticas 23%, Comida y bebida 17% y Actividades recreativas un 15%). A niveles absolutos, 14 sectores acumulan más del 80% de los asalariados cobrando del Sepe, tres de ellos superando los 100.000 (Comidas y bebidas, Alojamiento y Comercio y Reparación de vehículos).
La duda estriba en qué pasará con el resto de sectores. Los agentes sociales defienden que no se puede sectorializar la prórroga porque se podrían generar desagravios. Entienden que si mantienen a trabajadores en el expediente es por necesidad. El Ministerio de Trabajo es partidario de prorrogar por igual a todas las empresas que tengan un Erte en activo, pero Economía y Hacienda quieren medir el coste que supondría y alegan problemas presupuestaríos.
Según cifras de Eurostat, la economía europea cayó un 11,7% en el segundo trimestre de 2020 y el empleo, en un 2.6%. La Comisión, en sus previsiones de julio, calculó el agujero en el producto interior bruto de la Unión en alrededor del 8,3% para este año, aunque esperaba un repunte en 2021. La ola de rebrotes que recorre en mayor o menor medida el continente, obligando a endurecer las medidas de contención, pone de nuevo en riesgo la recuperación económica.
El Banco Central Europeo advirtió también el pasado jueves de los riesgos para la economía de la Eurozona de un incremento importante del desempleo a partir de otoño y mostró su preocupación porque las políticas laborales no estén al nivel de los esfuerzos monetarios y fiscales en marcha.
La duda estriba en qué pasará con el resto de sectores. Los agentes sociales defienden que no se puede sectorializar la prórroga porque se podrían generar desagravios. Share on X