No hay legitimidad legal para que los diferentes cuerpos de seguridad del estado suspendan oficios religiosos como la misa en el estado de alarma que está viviendo España derivado de la pandemia del COVID-19. La libertad de culto permanece inalterada en las normativas establecidas.
Este hecho está dejando diferentes episodios. Uno se vivió hace unos días, pero ha trascendido el vídeo ahora. Se trata de la Parroquia San Jenaro en Madrid que oficiaba la misa de Resurrección en el patio situado enfrente de la Iglesia para que los vecinos que quisieran desde sus casas pudieran seguirla.
En ese momento el vídeo muestra cómo miembros de la policía local interfieren en la ceremonia religiosa para suspenderla. La actitud del sacerdote posteriormente es encomiable como se puede ver en el vídeo:
La realidad, sin embargo, tal y como explicaba la asociación e-Cristians es bien distinta y la legalidad permite ese oficio religioso.
El Real Decreto de declaración de estado de alarma, y la posterior normativa excepcional, «ni ha suspendido la apertura de los templos religiosos, ni la celebración del culto, ni la asistencia al mismo. Sí lo ha hecho con las ceremonias fúnebres en los términos del artículo quinto de la Orden SND/298/2020, de 29 de marzo, por la que se establecen medidas excepcionales en relación con los velatorios y ceremonias fúnebres para limitar la propagación y el contagio por el COVID-19. El resto de las ceremonias religiosas se condicionan a la adopción de las medidas organizativas previstas en el artículo 11 del Real Decreto de declaración de estado de alarma», citaba e-Cristians haciendo referencia al dictamen sobre la apertura y acceso de lugares de culto durante la epidemia del Covid-19, elaborado por Manuel J. Silva, abogado del estado en excedencia y miembro del Secretariado General d’e-Cristians.
Libertad de culto y de acción cristiana
Por otro lado, otro vídeo encomiable es el del sacerdote Antonio María Domenech Guillén animando a sus compañeros religiosos a hacerse más y más presentes en la sociedad precisamente en el contexto de la pandemia.
Domenech es un párroco de Cuenca proveniente de Barcelona. Es vicario judicial de la Diócesis de Cuenca y ha escrito el libro Anécdotas de un cura rural. El vídeo de este sacerdote, que suele estar muy activo en las redes sociales y en su canal de Youtube, es el siguiente:
En otro orden de cosas. Otro ejemplo es el de monseñor José Ángel Saiz Meneses que logró que el ayuntamiento de Sabadell accediera a que se siga celebrando la adoración perpetua en la parroquia mencionada, que la policía había suspendido.
Otras parroquias como la Iglesia de santa Teresita en Barcelona no han tenido tanta suerte como se puede ver en la imagen siguiente:
¿Qué hacer si la policía interrumpe nuestras Misas?
¿Por qué la libertad de culto sigue vigente, y la policía no puede impedirlo?
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