El periódico Ara usa el coronavirus contra la fe cristiana

¿Se puede usar el coronavirus contra la fe cristiana? El diario catalán Ara considera que sí. En un artículo titulado «Los gestores de creencias deben dar un paso al lado» el periodista Àlex Gutiérrez ha cargado contra la condición cristiana en su manifestación contra el coronavirus.

Gutiérrez, que trabaja en el diario desde 2011 como jefe de la sección Medios, afirma «El consuelo espiritual o anímico es saludable, para hacer frente a una situación extrema y atípica. Pero hay que tener cuidado. Que el Papa anuncie que reza a la Virgen para hacer frente al coronavirus puede parecer una noticia inocua, pero desvía el foco de una noción básica: la solución no está en manos de ningún presunto Dios -que, en el mejor de los casos, ha dejado a la humanidad a la intemperie-, sino en los hombres y mujeres«.

El jefe de sección de Ara exige «responsabilidad» a los líderes religiosos, por informaciones como esta: «La catedral de Huesca tratará de frenar el coronavirus exhibiendo el Santo Cristo de los Milagros, como en la peste de 1497». Sobre esa noticia, afirma: «El consuelo espiritual o anímico es saludable, para hacer frente a una situación extrema y atípica. Pero hay que tener cuidado».

Cabe preguntarse por qué con las creencias espirituales y específicamente cristianas, su manifestación -más necesaria que nunca en estas circunstancias- y su apoyo anímico en la fe representan, a juicio de Gutiérrez «hay que tener cuidado». Además, que su condición de no creyente no le haga partícipe de la devoción al Santo Cristo de los Milagros, no le debería cargar de razones para que otros sí lo sean.

Ara y su manipulación mediática

El periodista de Ara realiza una manipulación mediática considerable al mezclar diferentes noticias que no tienen conexión para construir un relato efectista contra el catolicismo y los católicos. Por ejemplo, hace referencia a un titular del diario mexicano 24 Horas, que afirma: «Rezan en una mezquita para frenar el coronavirus y 190 personas terminan infectadas». ¿Qué tendrá que ver ese episodio, que proviene, además, de otra confesión con la visión del catolicismo en Cataluña?

«La batalla contra el coronavirus -afirma Gutiérrez en el periódico independentista- también se juega en el tablero de la información. La web Maldita.es ya tiene más de 200 falsas noticias que han corrido. Muchas prometen protección contra el contagio sin ton ni son: desde el ajo hasta el aceite de sésamo, desde la orina infantil hasta la cocaína. ¿Qué persiguen los que ponen en marcha estas mentiras? Probablemente destruir la noción de que una verdad compartida es posible. Ahora, más que nunca, hay una unidad de acción castrense: todas las medidas dictaminadas son papel mojado si una minoría suficiente se las salta en nombre de las creencias. Son los apóstoles del peligroso mantra «Tú tienes tu verdad, yo tengo la mía»».

¿En qué se basa el periodista para acusar a la Iglesia de ser «una minoría suficiente» que «se salta todas las medidas dictaminadas en nombre de las creencias»? ¿Por qué las personas católicas formarían parte de una supuesta trama de difusión de información falsa? Hacer pasar a la religión como un fenómeno de mentiras y fábulas es tratar de desprestigiar una fe que da una razón de vida a más de dos mil millones de personas en el mundo.

Finalmente el periodista agradece al Papa: «Hay que agradecerle a Francisco, por ejemplo, que haya promulgado indulgencias a los enfermos de coronavirus: no es cuestión de que el sacramento de la extremaunción ponga en riesgo más personas. Se sorprendería menos de estas medidas si contemplara la religión católica como un espacio cabal de personas que desean el bien común para las sociedades donde viven y el suyo propio en la Salvación.

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