Cerca de 65.000 personas, que residen mayoritariamente en zonas de alta diversidad social y cultural, serán las beneficiarias directas de las ayudas que la Obra Social «la Caixa» ha concedido este año a través de 91 proyectos que fomentan la convivencia ciudadana intercultural, el desarrollo social y la igualdad de oportunidades. La suma de estas ayudas alcanza los 2,3 millones de euros y el conjunto de proyectos seleccionados cuenta con la participación de cerca de 500 profesionales y 1.800 voluntarios.
La convocatoria de Interculturalidad y Acción Social 2018 forma parte del Programa de Ayuda a Proyectos de Iniciativas Sociales que impulsa anualmente la Obra Social «la Caixa» y que para este año invierte 18,5 millones de euros en proyectos que atienden a diferentes ámbitos, siempre con el propósito de ofrecer oportunidades a los colectivos en situación de vulnerabilidad social.
La convocatoria de Interculturalidad y Acción Social pretende favorecer la interacción entre diferentes colectivos del territorio con el fin de estimular la convivencia ciudadana intercultural y el desarrollo comunitario. A la hora de seleccionar los proyectos para esta convocatoria se han priorizado aquellas propuestas que favorecen la interacción entre diferentes colectivos del territorio facilitando el paso de la coexistencia a la convivencia, que abordan la prevención y/o resolución de conflictos en territorios de alta diversidad, que contemplan la capacitación de personas que actúan como agentes de cambio en la comunidad y que estimulan la participación ciudadana y la implicación y corresponsabilidad de las familias y los propios beneficiarios en el proceso educativo.
Además de evaluar los objetivos, la metodología y el impacto previsto, la Fundación Bancaria «la Caixa» pone especial énfasis en aquellos proyectos que promueven el respeto y la dignidad de las personas, así como el sentimiento de pertenencia a la comunidad y la implicación personal por la cohesión social. El empoderamiento de las personas destinatarias como agentes activos de cambio es crucial en el diseño, el desarrollo y la evaluación de las actividades. Sólo así se consigue un planteamiento integral que actúa directamente con la persona y cuya finalidad es la promoción de la comunidad.